De la intimidad, a la invasión del Estado en la privacidad
La transparencia, como parte del derecho al acceso a la información pública, encuentra su límite ante la esfera de protección de lo privado de las personas.
Autor: Francisco Eduardo Arriola Aranda
Licenciado en Estudios Políticos y Gobierno por la Universidad de Guadalajara, con especialidad en Gestión Pública, Maestro en Administración Pública, por la Universidad del Valle de México. Está en proceso de Grado en la Maestría en Transparencia y Protección de Datos Personales. En la Universidad de Guadalajara, dentro del padrón de excelencia del CONACYT.
También cuenta con Estudios de la Maestría en Políticas Públicas Locales en el Colegio de Jalisco y de Derecho Público Administrativo y en Competencias para la Función Pública en la Universidad Panamericana, Actualmente se encuentra estudiando el Doctorado en Derecho, con orientación a protección de datos personales por el Instituto de Estudios Jurídicos (IDEJ).
Su experiencia profesional dentro de la administración pública, se extiende a los tres ámbitos de Gobierno, en funciones directivas y como asesor en diferentes temas, actualmente es socio fundador de ITConsultores, ITACA de México, empresa dedicada al Desarrollo de Inteligencia y Talento, ha sido consultor y asesor en materia de Políticas Públicas, Finanzas Públicas, Seguridad, Trasparencia, Protección de Datos Personales y Rendición de cuentas, para gobiernos locales, es miembro de la Asociación Mexicana de Analistas en Inteligencia Estratégica y Criminal, y es Coordinador de Ponencias en el Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Protección de Datos del Estado de Jalisco. ITEI.
